por Legisladora sugiere medidas preventivas ante regreso a clases y posibles brotes de COVID-19
Con el inicio del ciclo escolar 2024-2025 y el aumento de nuevos casos de COVID-19, así como otras enfermedades asociadas con cambios bruscos de temperatura, se ha vuelto esencial reconsiderar el uso del cubrebocas como medida de protección en las escuelas.
Blanca Anzaldúa Nájera, legisladora local electa por el Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), ha solicitado a la Secretaría de Salud y a la Secretaría de Educación de Tamaulipas (SET) que presten especial atención a los grupos vulnerables, incluyendo a niños y personas mayores. Anzaldúa subrayó la importancia de fomentar el uso de cubrebocas en las aulas, especialmente en grupos grandes de 40 o 50 alumnos, como una medida preventiva, más que una imposición.
“Es fundamental que los padres de familia también sean corresponsables en esta medida para evitar que sus hijos se enfermen”, destacó Anzaldúa, enfatizando la corresponsabilidad de los padres en la protección de sus hijos.
La legisladora advirtió que las temperaturas más frescas y los cambios climáticos podrían impactar la salud de los estudiantes y personas mayores en las próximas semanas. Además, recalcó que “el uso de cubrebocas no solo previene el COVID-19, sino también enfermedades como la gripe, comunes en esta temporada”.
Anzaldúa expresó su preocupación ante el posible resurgimiento de casos de COVID-19 y alertó sobre el riesgo de un nuevo brote si no se implementan medidas preventivas adecuadas, especialmente en los grupos más vulnerables.
